Abr 12, 2021 | Noticias
Miami, 12 abr (EFE).- Al menos tres personas murieron este fin de semana a consecuencia de las tormentas de viento y lluvia que, acompañadas de tornados, granizo y rayos, azotaron una amplia zona del sur de EE.UU., incluyendo Florida, informaron medios locales.
Una de las víctimas es una adolescente de 17 años que pisó un cable de electricidad que estaba en el suelo a causa de la caída del tendido eléctrico por la tormenta en el centro de Florida y las otras dos murieron en el estado de Luisiana.
La joven circulaba en un automóvil por una carretera de la localidad de Spring Hill cuando chocó contra el poste eléctrico caído, lo que hizo que se incendiara el vehículo.
Logró salir por la puerta del acompañante del conductor, pero pisó un cable y se electrocutó, según informó la Policía de Carreteras de Florida.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, al menos 20 casas y otras estructuras resultaron dañadas en las inmediaciones de Bradenton, en el condado Manatee, en el centro-este de Florida, a causa de la tormenta y una persona resultó herida.
Las fotografías publicadas este lunes muestran daños en edificios e infraestructura, árboles y postes caídos y algunas zonas inundadas.
El domingo más de 20.000 personas quedaron sin electricidad a causa de las tormentas, que también afectaron a Arkansas, Luisiana y Misisipi.
En Homestead, unos 35 kilómetros al sur de Miami, el porche de una vivienda salió volando por los aires por la tormenta.
El Aeropuerto Internacional de Miami informó de 70 vuelos retrasados y 142 cancelados debido a las tormentas de este domingo.
(c) Agencia EFE
Ago 4, 2020 | Noticias
La tormenta tropical Isaias generó tornados y arrojó lluvia durante una marcha hacia el interior de la costa este de EE. UU. Que tiene estados en alerta hasta Massachusetts después de tocar tierra como huracán de categoría 1 cerca de Ocean Isle Beach, Carolina del Norte, durante la noche, matando a Al menos una persona.
Las metrópolis de la costa este, incluyendo el área de Washington, Filadelfia y Nueva York, vigilaban los vientos y la lluvia potencialmente peligrosos a medida que la tormenta avanzaba rápidamente.
El ojo del huracán se movió sobre tierra justo después de las 11 p.m. del lunes con vientos máximos sostenidos de 85 mph, y sus vientos máximos cayeron a 70 mph el martes temprano. Pero los pronosticadores dijeron que continuará infligiendo daños mientras se muda a Nueva Inglaterra a última hora del martes.
El gobernador Roy Cooper, de Carolina del Norte, habló de “doble problema” en ABC el martes por la mañana cuando describió el estado tratando de evacuar y rescatar a las personas cuando el huracán golpeó, mientras que también trataba de minimizar el riesgo de propagar el coronavirus.
El estado tenía que proporcionar más refugios, al menos dos docenas de aperturas, para que aquellos que tenían que abandonar sus hogares debido a inundaciones o incendios causados por cortes de energía, pudieran tratar de mantenerse socialmente distantes, mientras realizaban controles de temperatura y usaban máscaras.
Cooper instó a los evacuados a recurrir a refugios como último recurso, citando los riesgos de coronavirus y la necesidad de operar refugios a una capacidad reducida para permitir el distanciamiento social. “Ya sea que se etiquete como tormenta tropical o huracán, debe tomar esta tormenta en serio y asegurarse de que su familia esté lista”, dijo.
“En general, esta tormenta entró y salió bastante rápido”, dijo el martes a ABC Good Morning America. Añadió: “Estamos tristes por la fatalidad que sabemos que tenemos”.
Fuente: The Guardian.
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