Los reportes de crímenes de odio contra la comunidad latina, incluida la masacre a tiros del año pasado en El Paso, Texas, aumentaron en 2019, y el número total de informes de asesinatos motivados por racismo alcanzó su nivel más alto desde que se comenzaron a recopilar datos a principios de la década de 1990, según indicó un informe del FBI publicado el lunes.
De los 51 asesinatos de esta clase que se reportaron el año pasado, 22 de las víctimas, casi la mitad, murieron en la masacre de El Paso ocurrida el 3 de agosto de 2019. La mayoría de las víctimas eran latinos. Las autoridades han dicho que el asesino tenía como objetivo a los hispanos cuando condujo cientos de kilómetros hasta El Paso y disparó contra personas en un centro comercial Walmart.
La masacre fue investigada como terrorismo doméstico y este año murió otra persona debido a sus heridas. Ese fallecimiento elevó a 23 el número de víctimas por ese incidente.
Las autoridades dijeron que, antes del tiroteo, el asesino publicó una declaración racista llena de odio denunciando la “invasión” de inmigrantes mexicanos en Estados Unidos.
Los delitos de odio denunciados contra hispanos —que incluyen robos, asaltos y otros delitos— aumentaron a 527 el año pasado, en comparación con los 485 registrados en 2018, un incremento del 9%, según el FBI.
El número reportado de crímenes de odio contra personas negras se redujo ligeramente, de 1,943 a 1,930, mientras que ese tipo de delitos basados en la religión, la mayoría de ellos contra judíos e instituciones judías, aumentó en un 7%. Los crímenes por orientación sexual se mantuvieron relativamente estables.
En total, el 56% de los delitos de odio denunciados fueron motivados por prejuicios de laraza, etnia o ascendencia, según concluye informe del FBI.
El año pasado hubo 7,314 reportes de delitos de odio, frente a los 7,120 del año anterior, y se acercan a los 7,783 registrados en 2008.
El informe anual del FBI define los delitos de odio como aquellos que son motivados por prejuicios basados en la raza, religión u orientación sexual de una persona, entre otras categorías.
Las mejoras en el proceso de denuncias de los delitos motivados por prejuicios pueden explicar un cierto aumento en el número, pero los funcionarios de los cuerpos de seguridad pública y los grupos de defensa tienen pocas dudas de que se están cometiendo más delitos de odio.
Los datos se basan en informes voluntarios de las unidades policiales de todo el país. El año pasado, solo 2,172 agencias de seguridad pública de las 15,000 que participaron en todo el país reportaron datos sobre delitos de odio al FBI, según consta en el informe.
Después del ataque en El Paso, los residentes dijeron que el país tenía que abordar el racismo que impulsó el mayor asesinato de latinos en la historia moderna.
“Está claro que no fue un ataque al azar”, dijo Marisa Limón Garza, subdirectora del Hope Border Institute, poco después de los asesinatos en agosto de 2019. “Está claro que esto no se puede relacionar con una persona que padece una enfermedad mental”, añadió, “esa enfermedad es el racismo y la xenofobia”.
Fuente: Telemundo.