May 4, 2020 | Noticias
“Estamos muy seguros que tendremos una vacuna a finales de año”, aseguró anoche, optimista, el presidente, Donald Trump, contraviniendo –ha admitido- las recomendaciones de prudencia de los científicos a la hora de prometer una fecha para conseguir una inmunización contra el coronavirus.
“Los médicos me dirán que no debería decir esto, pero yo digo lo que pienso y es que vamos a tener una vacuna más pronto que tarde”. “Estamos presionando al máximo”, recalcó Trump bajo la pétrea mirada de la imponente escultura del presidente Abraham Lincoln durante un programa especial de la televisión Fox News retransmitido en directo desde el monumento, en la explanada del Mall de Washington.
Como fuente de su previsión sobre el calendario de la hipotética vacuna Trump sólo ha citado sus conversaciones con ejecutivos de compañías implicadas en el esfuerzo –y la carrera mundial– por hacerse con la fórmula para prevenir el contagio del nuevo coronavirus. Hay alrededor de un centenar de ensayos en marcha en todo el mundo, una decena de ellos en fase de ensayos clínicos. ¿Y si es otro país quien la consigue antes?, preguntó el periodista de la cadena. “Me da igual”, si otro país la consigue antes, me quitaré el sombrero. (…) tenemos que conseguir una vacuna. Sea quien sea quien la consiga, voy a ser su mayor fan. La quiero. Necesito la vacuna. Este país necesita la vacuna y la vamos a tener a finales de año”, insistió Trump.
Estados Unidos lleva unas cuatro semanas registrando alrededor de 2.000 fallecimientos diarios como consecuencia del Covid. “Va muy deprisa”, admitió Trump. A primeros de abril él mismo vaticinó que la cifra total de defunciones por la pandemia en EE.UU., que hasta finales de marzo comparaba con una gripe, estaría entre las 60.000 y 65.000. Ayer iban por más de 67.000 fallecimientos, y comentó que “serán 80.000 o 90.000”.
Abr 27, 2020 | Noticias
(CNN) ¿Alguien realmente quiere los dedos de un barbero en su cara en este momento?
Aquellos de nosotros que descubrimos que no somos esenciales para mantener a la sociedad funcionando nos hemos quedado atrapados en casa durante semanas. Nos estamos volviendo locos en la caja repentinamente limitada de nuestras vidas, y un viaje diario comienza a sonar bastante bien.
Pero eso puede no significar que estamos listos para meternos en una multitud deportiva, usar un taburete de bar o aceptar la promesa del viejo anuncio de Southwest Airlines: “¿Ahora es libre de moverse por el país”? El miedo al contagio todavía nos tiene desviados cuando se acercan extraños, y esa astucia en última instancia podría frenar un repunte económico.
Otros 4.4 millones de estadounidenses presentaron reclamos de desempleo por primera vez la semana pasada, elevando el número de personas que han perdido el trabajo en las últimas cinco semanas a 26.5 millones apocalípticos.
Cada reclamo individual representa una vida al límite. Las personas que nunca tuvieron necesidades antes van a los bancos de alimentos, y la tasa de desempleo se acerca repentinamente al territorio de la Gran Depresión. Es la misma historia en todo el mundo.
El presidente Donald Trump cree que la demanda acumulada asegurará que la economía estadounidense despegue como un “cohete”, cuando la vida normal se abra y una vez que los clientes tengan la libertad de comprar y gastar nuevamente.
Pero incluso si el virus se desvaneciera en los EE. UU., lo que no es así, las tiendas, restaurantes, bares y cines probablemente se reabrirían a una capacidad reducida. Un café que tenía seis camareros podría necesitar solo tres. Y no hay garantía de que esos otros trabajos volverán alguna vez.
Ese escenario se repetirá millones de veces. Menos trabajadores significarán menos personas con dinero para comprar automóviles e irse de vacaciones, lo que significará que industrias como el turismo, el entretenimiento y la hospitalidad tienen un largo recorrido. Entonces, después de ganar la batalla contra el coronavirus, la guerra para revivir a Estados Unidos probablemente continuará. Estamos hablando de años, no de meses.
Con información de CNN.
Abr 22, 2020 | Noticias
(CNN) El presidente Donald Trump dijo el martes que su próxima orden ejecutiva que prohíbe la nueva inmigración se aplicará solo a las personas que buscan Green Cards, durará 60 días y no afectará a los trabajadores que ingresen al país de manera temporal.
Explicando detalles de la medida por primera vez desde que tuiteó el lunes por la noche que “suspendería temporalmente la inmigración a los Estados Unidos”, Trump anunció algo menos que detener por completo la inmigración en medio de la pandemia de coronavirus .
En cambio, dijo que la disposición equivaldría a una pausa de 60 días solo para las personas que buscan el estatus de residente permanente en los Estados Unidos. Un funcionario de la administración con conocimiento del proceso le dijo a CNN que la orden solo aborda las green cards porque la porción de visa de trabajo temporal es más complicada y necesita más tiempo para resolver, particularmente dado que muchos de los que actualmente están en los Estados Unidos con visas de trabajo están trabajando en industrias relacionadas con la pandemia, desde trabajadores en plantas de procesamiento de alimentos hasta trabajadores de la salud.
Trump dijo en Twitter el miércoles que firmaría la orden más tarde en el día. Un funcionario de la administración le dijo a CNN que los asistentes legales pasaron el martes trabajando en la orden. Trump dijo que revisaría la orden ejecutiva al final de ese período de 60 días y decidiría si debería renovarse.
Trump sugirió que habrá efectos económicos de la orden, indicando que “protegería a los trabajadores estadounidenses”, y señaló que tendrá ciertas exenciones.
“Al pausar la inmigración, ayudaremos a poner a los estadounidenses desempleados en la primera línea de trabajo a medida que Estados Unidos se reabre”, dijo Trump. “Sería incorrecto e injusto que los estadounidenses despedidos por el virus sean reemplazados por nuevos trabajadores inmigrantes enviados desde el extranjero. Primero debemos cuidar a los trabajadores estadounidenses”.
Los detalles sobre las exenciones, dijo más tarde, podrían llegar “esta noche o mañana”.
Abr 21, 2020 | Uncategorized
El presidente Donald Trump dice que firmará una orden ejecutiva para “suspender temporalmente la inmigración” en medio de la pandemia mundial.
“A la luz del ataque del enemigo invisible, así como la necesidad de proteger los trabajos de nuestros GRANDES ciudadanos estadounidenses, ¡firmaré una orden ejecutiva para suspender temporalmente la inmigración a los Estados Unidos!”
Trump tuiteó el lunes por la noche.
El tweet no especificó cuándo se firmaría la orden ejecutiva, pero las fuentes le dijeron al Miami Herald que se esperan más detalles el martes. Trump se ha referido repetidamente al coronavirus como el “enemigo invisible”.
En las últimas semanas, las masas rechazaron a los migrantes en la frontera sur.
Esta historia se actualizará cuando haya más información disponible.
Con datos de Miami Herald.
Abr 16, 2020 | Noticias
WASHINGTON – El presidente Donald Trump emitirá el jueves nuevas directrices para los estados con el objetivo de aliviar las restricciones de distanciamiento social y reabrir partes del país a medida que Estados Unidos lidia con las consecuencias económicas de la pandemia de coronavirus.
Los estados tendrán que cumplir con un cierto conjunto de “métricas médicas” antes de que puedan sentirse seguros de reapertura, de acuerdo con las directrices proporcionadas por altos funcionarios de la administración. Los funcionarios no proporcionaron detalles sobre las métricas, pero enfatizaron que son “recomendaciones” y brindan flexibilidad a los gobernadores y líderes locales.
El presidente ha dicho que algunos estados podrían levantar las restricciones, enviar a las personas de regreso al trabajo y abrir escuelas antes de que las pautas actuales apunten a frenar la propagación del coronavirus a finales del 1 de mayo.
“Es muy emocionante. Ha sido un momento horrible para ver tanta muerte y destrucción ”, dijo Trump en la reunión informativa del grupo de trabajo del miércoles.
Trump y los funcionarios han dicho que es imperativo revivir una economía que ha sido maltratada en el último mes por reclamos récord de desempleo y fuertes caídas en el mercado de valores.
El presidente y sus ayudantes también enfatizaron que quieren reiniciar la economía “de manera segura”. Una de las pautas establece que, antes de cualquier reapertura, los estados y las ciudades deben asegurarse de tener la capacidad hospitalaria suficiente para acomodar a los pacientes con coronavirus.
El anuncio se produce después de que Trump realizó varias llamadas telefónicas en los últimos días con ejecutivos de negocios y legisladores para ayudar a determinar cómo reiniciar la economía. El presidente había dicho inicialmente que crearía un “grupo de trabajo” para examinar si se extendían las pautas de distanciamiento social, pero nombró a más de 100 líderes de la industria a quienes dijo que se unirían a lo que la Casa Blanca describió como “grupos de la industria de reactivación económica”. No estaba claro cuál sería exactamente su papel.
La Casa Blanca también anunció el jueves que 65 senadores y 32 miembros de la Cámara servirían como parte del grupo del Congreso Open Up America Again. El presidente y los miembros de su administración hablaron con los legisladores el jueves para discutir los planes para reiniciar la economía, así como una serie de temas que incluyen el alivio para las pequeñas empresas, la cadena de suministro médico y la salud mental.
El senador Mike Braun, republicano de Indiana, dijo que el presidente describió pautas bastante básicas sobre cómo el país reabriría en una llamada con los senadores el jueves por la tarde, señalando que las decisiones podrían tomarse no solo a nivel estatal, sino a nivel de condado también.
Con información de CNN.
Suscríbete a nuestro canal
